Unidad 2 El Salvador

Discipulado la Fe del Mesías Unidad 2 El Salvador

Capítulo 2
JESUCRISTO EL SALVADOR
El arrepentimiento y la conversión
El nuevo nacimiento
El bautismo
Gracia y Ley
La fe que salva
Las obras
La Seguridad de la Salvación
Creencia de salvación de los Apóstoles
La oveja perdida-El Hijo Prodigo-La Dracma Perdida
La Predestinación
El calvinismo y el Arminianismo sus aciertos y errores
La Blasfemia contra El Espíritu Santo
Los hijos de perdición
El infierno
El lago de fuego o gehena

Capítulo 2
JESUCRISTO EL SALVADOR

EL ARREPENTIMIENTO Y LA CONVERSIÓN

El mensaje de Juan el Bautista fue arrepentíos y convertíos que el Reino de los Cielos se ha acercado.
Las primeras palabras de Jesús cuando inicio su ministerio en la tierra, fueron estas mismas palabras. El arrepentimiento y la conversión no son lo mismo, pero en la biblia van unidas, una no se separa de la otra. La letra “Y” denota la unión entre ambas.

Se llama arrepentimiento al acto espontaneo de comprender profunda y legítimamente los errores propios cometidos.

Conversión es aquel acto de aceptar el arrepentimiento y volver atrás, tomando un nuevo camino.

2 Crónicas 7:14; Proverbios 28:13; Mateo 3:8; Mateo 4:17; Joel 2:13

EL NUEVO NACIMIENTO

El nuevo nacimiento es aquella persona que se ha arrepentido y convertido. Una señal de ello es que ha visto la luz de Cristo y se ha convertido en hijo de Dios.
Este nuevo convertido le falta mucho camino por delante. Para no volver atrás de sus malos pasos, necesita una guía que lo entrene como discípulo de Jesús.

Tres tipos de personas nacidas de nuevo:

1. Niño: Bebe espiritual, aun no discierne el mundo espiritual tan claramente, comete errores muchas veces y no se diferencia de un inconverso.

Cualidades: Desea ardientemente la leche espiritual (la palabra de Dios), llora cuando no entiende, y desea con todas sus fuerzas el abrazo y el cariño de su Padre Celestial.

Defectos: Algunas veces puede pecar voluntariamente por efecto de su inmadurez espiritual: La ignorancia y su falta de discernimiento. Si un convertido no pasa de esta fase, El Señor puede tomar la decisión de llevárselo para que no sufra junto con los que no lo conocen. El pecado produce muerte y Dios es vida. Dios ama tanto a sus pequeños que los recoge a su reino.

Efesios 4:14-16; 1 Cor 3:1; 1 Ped 2:2; hebreos 5:11-14

2. Joven: El Joven espiritual es aquella persona que ha alcanzado tener el dominio de la Palabra de Dios. Conoce su autoridad y gobierno en el mundo espiritual. Se ha convencido que Dios es Todopoderoso y que las tinieblas no tienen poder sobre él. Predica la palabra con denuedo porque la conoce en su vida diaria.

Cualidades: Diestro en la palabra de Dios, Guerrero espiritual.

Defectos: Aun tiene puertas que cerrar, batalla con demonios, peca por ignorancia y le cuesta algunas veces comunicarse con Dios. Todas estas cosas, si persevera, las superará.

3. Adulto: El adulto espiritual es aquella persona que es madura. Puede juzgar todas las cosas desde una perspectiva espiritual, se mueve bajo la dirección del Espíritu Santo. Ha aprendido la sabiduría divina, bajo un estilo de vida genuino en obediencia a Dios. Es consciente de sus errores, aún tiene muchas cosas que aprender porque el mundo espiritual es infinito. Es desprendido del mundo material y sabe disfrutar el gozo de Cristo en su vida en cualquier circunstancia. Entiende lo que es humillación y humildad. Ha dejado el ego a un lado. Se ama a sí mismo y a los demás. Los frutos del Espíritu, le son evidentes.

1 Juan 2:12-15; 1 Cor 2:15; 1 Cor 13:11-13

EL BAUTISMO

El bautismo es esa inmersión física y espiritual que un convertido experimenta.

El bautismo Físico: Es llamado el bautismo de Juan el Bautista. Se hace con agua, sumergiéndolo completamente. Esto tiene como fin explicar el significado espiritual de una sepultura. El inmergido bajo las aguas está dejando sepultado su viejo hombre lleno de pecados. Al ser levantado representa su resurrección a vida en una nueva criatura. En el bautismo estamos compartiendo la muerte y resurrección de Jesús.

Este bautismo de Juan no salva, es solo un símbolo que nos lleva a ser consciente de que ahora pertenecemos a Cristo y de manera voluntaria dejaremos el pecado para disfrutar de su vida.

Mateo 28:19-20; Hechos 19:4 ; Hechos 2:38 ; 1 Pedro 3:21; Marcos 16:16; Lucas 3:21-22; Hechos 2:38

El bautismo Espiritual: Es llamado el bautismo del Espíritu Santo y fuego, este bautismo es una inmersión del Agua y Sangre de Cristo espiritual directamente en nuestras conciencias, nos ayuda a obedecer a Dios de una manera genuina y sincera. Capacita e instruye al creyente en la palabra de Dios. Se le llama de fuego porque es capaz de consumir y romper cadenas espirituales. El oro se pule con fuego. Este bautismo abre nuestro entendimiento espiritual y lo libera al hambre de Dios. Nuestro crecimiento espiritual depende de este. Este bautismo se recibe por fe (Gálatas 3:2)

1 corintios 12:13; Juan 3:5 (El agua aquí representa la Sangre de Cristo que nos limpia. ver Juan 19:34); mateo 3:8-12; Hechos 22:16; Juan 1:33; 1 Tes 5:19

GRACIA Y LEY

La gracia es aquel regalo inmerecido que Dios nos concedió. Cuando estábamos cautivos en delitos y pecados por las garras del enemigo. Él nos salvó y nos hizo libres. La gracia depende completamente de Dios.

La Ley de Dios constituye las instrucciones que nos enseñan la voluntad de El. Ella es el maestro que nos lleva a Jesús. Con ella somos conscientes de que le agrada a Dios y que no. En hebreo es llamada la Torah y está conformada no solo de la ley de Moisés, sino, que es toda la palabra de Dios. El cumplir la ley no es algo que este fuera de nuestro alcance. Sus mandamientos nos traen vida y paz a nuestras almas.

Deuteronomio 30:11-20

Si la ley pudiera salvarnos lo haría, pero ella enseña que debemos obedecerla toda completa para que eso sea posible. Pero ella, tiene un mandamiento que es piedra de tropiezo para nosotros: “Sin derramamiento de sangre, no hay remisión de pecados”. Nuestra sangre está
muerta en pecados, por tanto, jamás satisfacemos la ley de Dios. La ley exige perfección y vida. Nuestra naturaleza pecaminosa y de muerte, no lo permite. Es por eso que necesitamos de la Gracia. La Sangre viva de Cristo logró cubrir nuestros pecados, darnos vida y así entrar al seno paterno celestial eternamente. La naturaleza de los animales que se usaron para los sacrificios eran el símbolo de esa sangre inocente de Cristo. La sangre de Cristo es mejor que la de Abel, porque la de él, pide venganza y la de Jesús perdona, esto quiere decir que, la Sangre del ser humano por naturaleza en lugar de perdonar, pide venganza. Por tanto, no sirve para perdonar nuestros pecados y vivificarnos. Es por eso que no podemos ser salvos por nuestra propia sangra sino a través de la Sangre poderosa Sangre de Cristo.

La Torah o Ley (Instrucción o consejo de Dios) se divide en tres partes:

1. Ley ceremonial: Rituales para expiación por el pecado
2. Ley civil o judicial: Reglas y normas para vivir plenamente en sociedad
3. Ley moral: Los diez mandamientos

Efesios 2:8-9; Gálatas 2:16-21; Santiago 2:10-11; Romanos 3:27-28; 11:6; Gálatas 5:4; Hechos 13:39; Romanos 3:20; Romanos 4:1-7; Gálatas 3:10-12; Gálatas 3:21; Gálatas 4:9-11; Gálatas 5:6; Filipenses 3:3-9; Colosenses 2:20-23; 2 Timoteo 1:9

LA FE QUE SALVA

Toda persona que entra al reino de los cielos, es porque ha aceptado a Jesús como su salvador, se hereda así, la fe de Jesucristo. Esta fe, viene acompañada de frutos. Son los frutos del Espíritu Santo. Toda persona que dice ser salva mostrará de menor a mayor proporción, los frutos de Dios.
Esta es la muestra de tener en nuestras vidas la fe otorgada por Jesús. Ahora somos guiados por el Espíritu Santo a obedecer a Dios. A través del amor. El amor es el único que puede mover la voluntad humana eternamente. Y llevarnos a la Vida.

Mateo 7:15-20

LAS OBRAS

Las buenas obras son parte de esta fe. Ellas no pueden salvarnos, pero si sirven de evidencia de que somos de Cristo. Nadie puede decir que pertenece a Dios y no hacer las mismas cosas que Dios hace.

Efesios 2:10; Santiago 2:14-17

Actividad en clases

¿Como puedes estar seguro que eres un hijo de Dios?

¿Estas contento de pertenecer a Cristo? ¿Cuál es tu evidencia?

¿Que frutos del Espíritu crees tener desarrollado y que otros necesitas fortalecer?

LA SEGURIDAD DE LA SALVACIÓN

«Por lo cual, queriendo Dios mostrar más abundantemente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento. Para que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo con los que hemos acudido para asirnos de la esperanza. La cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta dentro del velo» (Hebreos 6:17-19).

Aunque la evidencia bíblica asegura que somos salvos por medio de la sangre expiatoria de Jesucristo, hoy en día aún se arraiga en los corazones de muchos creyentes la creencia de la inseguridad de nuestra salvación que preponderaba a mediados del siglo pasado liderado bajo el papado, haciendo la obra de Cristo incompleta en la Cruz. Gracias a nuestro Creador, se ha arrojado luz a la creencia que la iglesia primitiva desde sus inicios creía acerca de la salvación por gracia y no por obras humanas. Romanos 11:5-6

¿Pero porque se cree aun en esto?

1. Por la mala interpretación bíblica
2. Por la creencia que la salvación depende en cierto grado de nosotros
3. Porque para ellos es imposible concebir que un hijo de perdición sea usado por Dios

Cuando sostenemos la creencia que nuestras obras nos dan entrada al cielo, estamos expresando que la salvación en el madero no fue suficiente para darnos salvación.

Uno de los temores de esta creencia es que, si se predica de la seguridad de la salvación, la gente va a tener motivos para seguir pecando. Entonces la mejor idea para ellos es generar miedo en el creyente. Si el creyente no hace esto o aquello será echado al infierno. Esta es una buena estrategia para tener a los creyentes en filas dentro de las iglesias, pero no es el verdadero evangelio de Gozo que predica Cristo.

Lo que debemos entender es lo siguiente:

¿La seguridad de nuestra salvación, es motivo para seguir pecando?

Claro que no. Al contrario, la evidencia que no hemos sido salvos es porque se sigue pecando. El que es salvo peca, pero se corrige día tras día, se le ven frutos de crecimiento en su vida espiritual a medida que pasa el tiempo. Puede que tenga momentos de estancamiento, pero vuelve a la carrera cuando aviva el fuego en su interior.
Mas el que no es salvo, peca sin ningún tipo de remordimientos. No muestra crecimiento espiritual con el tiempo. El crecimiento espiritual de santidad es fruto evidente de una persona que tiene El Espíritu Santo y está siendo constantemente lleno de su presencia.

¿Puede una persona ser salva y no obedecer la palabra de Dios?

Es imposible que una persona salva no sienta anhelo de agradar a Dios. El que ama a Dios se esmera por guardar la palabra y sus mandamientos que son vida. Juan 14:23-24; 1 Juan 2:4

¿Puede una persona ser usado en dones y aun así no ser salvo?
Claro que sí. La evidencia de un hijo de Dios son sus frutos, no sus dones. Dios les da la oportunidad a todos. Al final sus frutos lo delataran, si son bueno o malos el tiempo lo determinará. Salmos 68:18; Efesios 4:8; Juan 17:12

¿En dónde está la confusión?

La confusión está en las siguientes palabras en español:

*SALVACIÓN *PERDER *CONDENACION *CASTIGO

Estas palabras son la base o raíz principal para interpretar correctamente este tema. La generalización de estas palabras es lo que ha llevado a muchos a pensar en la perdida de la salvación, contradiciendo otros textos bíblicos que hablan acerca de la predestinación de los llamados hijos de Dios.

Existe la repetición de la misma palabra con significado distinto. Ejemplo: Los Cruzados hacen cruzados…
 Las palabras son las mismas pero su interpretación aclara el contexto. El primero se refiere a los caballeros medievales que participaban en expediciones militares (cruzadas) dirigidas contra los musulmanes para recuperar la Tierra Santa: Jerusalén. Y el segundo se refiere al cruce entre blancos y negros o del cruce entre distinta raza cultural (mestizos=sin raza pura).

LA PALABRA SALVACION no tiene un solo significado en la Biblia.

Salvación Griego sozo (σώζω, G4982)

1. SALVAR
2. LIBRAR
3. PRESERVAR LA VIDA, GUARDAR
4. SANAR UNA ENFERMEDAD
5. LIBERACIÓN MATERIAL Y TEMPORAL DE PELIGROS Y SUFRIMIENTOS
6. SALVACIÓN ESPIRITUAL Y ETERNA CONCEDIDA EN EL ACTO POR DIOS A AQUELLOS QUE CREEN EN EL SEÑOR JESUCRISTO.
7. LA LIBERACIÓN O SALVACION DE LA GRAN TRIBULACION EN LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO.

PERDER tiene los siguientes significados:

Perdición Griego apolumi (ἀπόλλυμι, G622)

1. DESTRUIR PARCIAL O TOTALMENTE
2. QUITAR LA VIDA FISICA , DAR MUERTE
4. EXTRAVIARSE
5. NO EXTINCION DEL SER SINO DE RUINA
6. PERECER
7. PERDER LA VIDA ETERNA QUE OFRECE CRISTO
8.PERDIDA DE BIENESTAR FISICA O ESPIRITUAL
9.DESTITUCION ESPIRITUAL
Se usa con el significado de Extraviarse en Lucas 15:8 -9

CONDENACIÓN tiene los siguientes significados:
krisis (κρίσις, G2920)

1. EL PROCESO DE INVESTIGACION, DISTINGUIR, SEPARAR
2. JUICIO
3. SENTENCIA
4. AUTORIDAD JUDICIAL
5. UN TRIBUNAL
6. VEREDICTO MAS SEVERO O DE MUERTE
7. CONDENAR
8. INSTRUIR Y ENSEÑAR
9. DISCIPLINAR

Juan 5:24; Mateo 7:2; 1Corintos 11:32

Cuando no sabemos diferenciar los contextos de estas palabras las malinterpretamos.

CREENCIA DE SALVACIÓN DE LOS APÓSTOLES

Según la Biblia, los apóstoles no concebían la salvación como una sola confesión inicial. Para ellos, la salvación estaba conformada de varios factores.

LA OVEJA PERDIDA, EL HIJO PRODIGO, LA DRACMA PERDIDA

Estas tres parábolas hablan de como Dios nos salva en diferentes formas. El nos salva como Pastor-Oveja, Padre e Hijo y Dueño-Posesión de Gran valor.

Una manera de perderse es extraviarse de la verdad, es desconocer por un tiempo la voluntad de Dios. Esto no se refiere perderse a manera de ser destruido como los impíos. Sino más bien que pierde su bienestar como heredero. El Hijo prodigo perdió su condición, pero nunca dejó de ser hijo. En todas estas parábolas, lo perdido fue rescatado y fue hallado. Juan 10:28

¿Se pierde la salvación?

No. El que ahora mismo está en el infierno siempre fue hijo de perdición eterna porque no recibió a Cristo de corazón. Aunque fue usado por Dios jamás se sujetó al Señorío. Esta persona creyó en Dios, le obedeció por un momento e hizo cosas buenas, pero creyó como los demonios. Los demonios creen, tiemblan y obedecen las ordenes que Dios le da (Satanás obedeció a Dios con las recomendaciones dadas acerca de Job), pero no se sujetan a Dios para adorarle con sinceridad y verdad. Dios conoce nuestros corazones y las intenciones serán reveladas al fin de los tiempos. Dios está buscando adoradores eternos en sinceridad, en espíritu y verdad, no temporales. Entre las parábolas de la oveja perdida y el hijo prodigo hay dos principios: “Dios jamás abandona un hijo u oveja que le pertenece, aunque esta se extravié” “El hijo perdido echa de menos la felicidad de estar con su Padre, aunque este alejado”. En ambas parábolas hay un reencuentro entre Pastor y oveja y Padre e hijo. El Señor es nuestro Pastor y nuestro Padre y nosotros sus ovejas y sus hijos. El amor vence cualquier obstáculo. La Gracia de Dios es poderosa en demostrar el amor de Dios hacia nosotros. Dios no descansa hasta encontrarnos y nosotros en buscarle. Esta es la perfecta comunión entre Dios y los hombres. Si aún no se da esta comunión, Dios jamás nos dejará ni nos desamparará. El permanece siendo fiel a pesar de nuestra infidelidad.

¿Qué pasa si se peca después de haber recibido la salvación?

Cuando un cristiano peca después de nacer de nuevo es porque aún es inexperto en la justicia divina, por ser niño espiritual es entendible. Pero una vez que adquiere el conocimiento, crece.

En este periodo, si hay un descuido espiritual y se peca voluntariamente o no, seremos castigados (disciplinados) por Dios, pero no seremos condenados junto con el mundo. Las consecuencias pueden llegar desde una debilidad física, una enfermedad hasta una muerte física. 1 corintios 11:32. En la mayoría de los casos es un proceso que nos ayuda a afilarnos en la obediencia a Dios por nuestro propio bien.

¿Qué gana un cristiano que se santifica?

Un cristiano que se santifica, madura. Gana una posición mayor en el reino de los cielos, gana galardones y recompensas, servicio maduro en esta tierra y en la por venir. Conforme a las obras seremos recompensados. Alcanza la promesa de arrebatamiento para ser la futura Esposa de Cristo. Son íntimos y amigos de Dios. Y como andan conforme al Espíritu Santo, siendo guiados por El, no reciben ninguna condenación, ni física, ni espiritual, ni eterna. Los que alcanzan la promesa de Arrebatamiento serán la Esposa De Cristo cuya condición para alcanzarla es santificarse. Alcanzar esta promesa debe ser nuestra principal esperanza.

¿Qué pierde un cristiano que no se santifica?

Pierde el arrebatamiento, por tanto, no se salvará de la gran tribulación. No alcanzan la mayoría de las promesas bíblicas, sobre todo la promesa de ser la Esposa de Cristo. No madura, es un niño espiritual. Como andan conforme a la carne reciben la condenación (sentencia) de ser disciplinados por Dios (aunque es motivo de tristeza, su tristeza es para edificación y no para condenación eterna). Es vulnerable a los ataques de Satanás. Sufren perdidas de galardones, recompensas y posición en el reino de los cielos, viven débiles y enfermos por causa de su desobediencia y estancamiento espiritual. No son aptos para el servicio de Dios porque son neófitos. Su estatura espiritual no es la correcta, aunque físicamente muestren tener años en el evangelio.

¿Puede un hijo de perdición eterna ser usado por Dios?
Si. Totalmente. Judas Iscariote fue Usado por Dios enormemente.

LA PREDESTINACIÓN

Somos escogidos como hijos de Dios para salvación desde mucho antes que fuéramos creados.
Desde antes de la fundación del mundo Dios nos escogió para ser salvos por medio de Cristo. Dios sabe quiénes eran las personas que los iban a aceptar de verdad y esos los predestinó desde antes de crear el mundo. Desde antes que Dios nos creara ya Él nos conocía y le dio a cada uno un destino. Es por eso que jamás se perderán, porque son escogidos para ser salvos para siempre y de esos llamados salvos, escogió a un grupo para ser su Esposa.

En Romanos 8:29-30 Dice: 29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. 30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó. (raya añadida).

EL CALVINISMO Y EL ARMINIANISMO SUS ACIERTOS Y ERRORES

El calvinismo y el Arminianismo son dos sistemas de teología que intentan explicar la relación entre la soberanía de Dios y la responsabilidad humana con respecto a la salvación. El calvinismo es llamado así por Juan Calvino, teólogo francés que vivió desde 1509 hasta 1564. El Arminianismo es llamado así por Jacobo Arminio, un teólogo holandés que vivió desde 1560 hasta 1609.

Así que en el debate del Calvinismo vs. el Arminianismo, ¿quién está en lo correcto? Es interesante notar que, en la diversidad del Cuerpo de Cristo, hay toda clase de mezclas del calvinismo y el Arminianismo. Muchos creyentes llegan a una clase de mezcla entre estos dos sistemas. Dios es absolutamente soberano y omnisciente. Los seres humanos somos llamados a tomar una genuina decisión de poner nuestra fe en Cristo para salvación. Estos dos factores nos parecen contradictorios, pero en la mente de Dios, ambos tienen perfecto sentido.

Hemos subrayado, lo que postula nuestra visión.

LA BLASFEMIA CONTRA EL ESPÍRITU SANTO

La blasfemia contra el Espíritu Santo de Dios es el rechazo absoluto y consciente que hace una persona acerca de Dios. Es un desprecio eterno por el Señorío de Cristo. Mateo 12:22-37; 2 Pedro 2:10

Dios es su soberanía eterna ha decidido salvar a aquellos corazones que estén dispuestos a obedecerle por siempre, por eso nos escogió desde antes de la fundación del mundo (Romanos 8:29-39). Dios no desea repetir la batalla que hubo en el cielo con Lucero. Dios desea una descendencia de personas santas y obedientes.

LOS HIJOS DE PERDICIÓN

Una persona que nunca dio muestras de frutos espirituales del Espíritu Santo no es de Dios. puede ser usado en dones y en el ministerio y aun así no haber sido salvo. El hijo de perdición puede simpatizar con el evangelio, pero no obedecer el Señorío de Dios para obedecerle completamente y para siempre.

No podemos garantizar y lanzar un juicio de condenación en contra de alguien, porque a ciencia cierta no sabemos quiénes serán salvos. El apóstol Pablo dijo que no juzgáramos antes de tiempo (1 Corintios 4:5). Dios sabe quiénes son suyos, porque sus ovejas escuchan su voz y el las conoce (Juan 10:27-28). En cambio, al impío, aunque haya hechos milagros y prodigios en su nombre, no los conoce como ovejas de su prado (Mateo 7:21-23). Dios respalda su nombre. Y el nombre de Jesús tiene autoridad. El impío que desee servir a Dios también necesita obedecerlo durante el tiempo de su servicio como los demás.

JUDAS EJEMPLO DE HIJO DE PERDICION

Judas a pesar de ser hijo de perdición (Juan 17:12), demostró mejor obediencia que los demás (Salmos 41:9). Durante el tiempo de su servicio fue el tesorero, cargo que solo desempeña alguien de suma confianza. El impío al igual que Judas puede demostrar un buen servicio. El problema es la raíz de su corazón que más tarde que temprano se revela contra Dios. Al final la cosecha da su fruto. El trigo y la cizaña crecen juntas, pero, en conclusión, la cizaña tendrá un fruto malo. El impío es capaz de obedecer a Dios parcialmente, como lo hace un genuino creyente que le puede servir al diablo en su momento. Pero al final la naturaleza del impío saldrá a la luz, igual que la de un hijo de Dios cuando les sirve a las tinieblas, deja su antigua vida y sigue lo que su naturaleza divina le dicta.

Tanto el de corazón impío o no, deberá servir a Dios en obediencia, de lo contrario será avergonzado. Hechos 19:11-20; Mateo 26:34

EL INFIERNO

El infierno es un lugar temporal para los hijos de perdición. Se encuentra en la parábola del Rico y Lázaro (Lucas 16:19-31). Las parábolas no son cuentos ordinarios, el Señor Jesús enseñaba al Pueblo a través de ellas, porque ocultan verdades espirituales. Jesús lo hacía con el fin de que la gente buena lo entendiera. Y que los impíos no las entendieran. Jesús sabía que, si el impío la entendía, iba a ser peor para esa persona.

¿Por qué?

Al entenderla se iban a arrepentir de su mal proceder. Luego su naturaleza pecaminosa los iba hacer caer nuevamente y pisotear la Sangre de Jesucristo. (recordar que el arrepentimiento tiene dos dimensiones: arrepentimiento=ser consciente de sus malos actos y parar. Y conversión= retroceder y tomar otro camino). El impío muestra un apto voluntario de su mal proceder (se arrepiente), arrepentirse es como hacer un alto al mal camino y quedarse allí. Al quedarse así, deja de hacer lo malo, pero se cansa y sigue avanzando por el mal camino, nunca salió de él. Conversión es ser consciente de que estamos de pie en el mal camino y retroceder tomando otro camino diferente, en este caso el de Cristo. El impío se arrepiente, pero no se convierte. Esto en el mundo espiritual tiene mayor condenación. Al permitir Dios, que el impío no entienda a través de las parábolas, es la forma como Dios muestra su misericordia para los no eternamente creyentes. No hay mayor castigo en el mundo espiritual que conocer y gustar de Dios y luego echarse atrás. Es mejor no haberle conocido, que haberle conocido y rechazarle al final. Es mejor ser castigados por los propios pecados, que por despreciar a Cristo luego de haberlo experimentado. Ambos finales son igual de malos pero el uno es peor que el otro.

2Pedro 2:21-22. Reina Valera 1960 (RVR1960)
21 porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado.
22 pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.

Hebreos 6:4-6. Reina-Valera 1960 (RVR1960)
4 porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos partícipes del Espíritu Santo,
5 y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero,
6 y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio.

EL LAGO DE FUEGO O GEHENA

El lago de fuego es el lugar eterno de castigo para los impíos. Ese lugar no fue creado para ellos. Por su libre voluntad escogieron la ausencia de Dios y esto es lo que representa. En esta tierra aun gozamos de la presencia de Dios, mientras estemos en esta tierra Dios hace resplandecer su sol sobre justos e injustos, estamos en un tiempo de escoger el camino eterno y aun el Espíritu Santo hace su obra aquí. Pero después de partir de esta tierra, estar ausentes de Dios es el mismo lago de Fuego. Gehena representa físicamente un basurero donde todo lo que no sirve es echado allí. Los impíos serán condenados en ese lugar junto con el adversario, el anticristo y el falso profeta. (Apocalipsis 20:10-15).

ACTIVIDAD EN CLASES

¿Qué tan importante es para ti conocer la seguridad de tu salvación?
¿Como puedes darte cuenta que una persona está dando muestras de que es salva?
¿Cómo diferencias un hijo nacido de Dios y el que aún no lo es?
¿Qué aspectos son necesarios para saber si una persona es salva o no?
¿Puedes condenar anticipadamente a alguien por sus actos presentes?

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